En el sector de las finanzas, la disminución de la carga tributaria es el constante objetivo para todos los autónomos y empresas. Una herramienta crucial lograrlo son las deducciones fiscales, que permiten reducir la base imponible y, por ende, los impuestos a pagar. Pero, ¿qué son exactamente las deducciones fiscales y cómo puedes aprovecharlas al máximo?
¿Qué son las deducciones fiscales?
Las deducciones fiscales son beneficios otorgados por las autoridades tributarias que permiten restar ciertos gastos o inversiones del total de los ingresos sujetos a tributación, disminuyendo así la base imponible sobre la cual se calcula el impuesto a pagar. En pocas palabras, son una forma legal y válida de reducir la carga fiscal.
Requisitos para que sea un gasto deducible
Pero antes debes de saber que gasto puede ser o no deducible. Para que sea considerado deducible, generalmente debe cumplir con ciertos requisitos establecidos por las leyes fiscales. Estos requisitos pueden variar según la jurisdicción y el tipo de gasto, pero algunos criterios comunes incluyen:
- Que la persona física/autónomo esté dado de alta en Hacienda y en el RETA (Régimen Especial de Trabajadores Autónomos) de la Seguridad Social.
- Que el autónomo esté en el régimen de Estimación Directa, siendo indiferente la modalidad tanto normal o simplificada.
- El gasto debe estar directamente relacionado con la actividad económica del contribuyente y ser necesario para su desarrollo o mantenimiento.
- Debe ser posible justificar el gasto como parte de la actividad económica realizada, proporcionando documentación que demuestre su relación con la generación de ingresos.
- Es fundamental llevar un registro detallado y preciso de todos los gastos deducibles, incluyendo facturas, recibos y cualquier otra documentación que respalde la transacción.
Deducciones fiscales más comunes
- Amortización de bienes. Permite deducir la depreciación de activos utilizados, pérdida de valor, en la actividad económica; como maquinaria, equipos informáticos o vehículos.
- Combustibles. Los gastos relacionados con el combustible, como la gasolina, para desarrollar la actividad empresarial pueden ser deducibles, siempre que estén justificados.
- Comisiones de tarjetas o transferencias. Las comisiones bancarias generadas por transacciones financieras relacionadas con la actividad económica pueden ser deducibles. Desde las comisiones por el mantenimiento de una cuenta, por hacer transferencias y hasta por tener una tarjeta; al ser todo lo mencionado gastos necesarios para la actividad profesional se pueden desgravar en su totalidad en el IRPF.
- Cuota de autónomos en la SS.SS. La cuota mensual o trimestral de autónomos, al ser obligatoria, puede ser deducible como gasto necesario para el desarrollo de la actividad empresarial. Cabe destacar que el IVA no entraría en esta categoría, por lo que no sería desgravable.
- Dietas. Los gastos de comidas durante la jornada como el alojamiento en viajes de negocios pueden ser deducibles, si están justificados y no exceden los límites establecidos por la normativa fiscal.
- Dominios web y licencias de software. Los gastos relacionados con la adquisición y mantenimiento de dominios web, así como las licencias de software necesarias para la actividad empresarial, pueden ser deducibles tanto en el IRPF como en el IVA.
- Facturas de internet y línea móvil. Los gastos asociados a internet y telefonía móvil, solo si son para fines empresariales, pueden ser deducibles tanto el IRPD como el IVA, siempre que estén justificados y sean utilizados exclusivamente para la actividad económica.
- Formación. Los gastos de formación y reciclaje profesional relevantes para el desarrollo de la actividad empresarial son deducibles. Un ejemplo sería seminarios o cursos profesionales sobres temas concretos que tengan gran relación con la actividad profesional desempeñada.
- Gastos de asistencia a ferias y eventos del sector. Los gastos relacionados con la movilización a eventos del sector pueden ser deducibles debido a la promoción de la empresa. Este gasto deducible va muy ligado al mencionado anteriormente, las Dietas.
- Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI). El pago del impuesto sobre bienes inmuebles correspondiente a locales comerciales u oficinas utilizados para la actividad empresarial puede ser deducible. De igual modo se pueden reducir la tasa de basuras y otros impuestos y tasas vinculados a la propiedad desde la que se ejerce la actividad.
- Materias primas. Los gastos relacionados con la adquisición de materias primas necesarias para la producción de bienes o prestación de servicios, dada su naturaleza indispensable, son deducibles tanto el IVA como en el IRPF al ser consideradas “Gastos de Explotación”.
- Móvil del trabajo. Los gastos asociados al uso de teléfonos móviles para fines empresariales son deducibles, siempre que estén justificados y se utilicen exclusivamente para la actividad económica.
- Publicidad y Redes Sociales. Los gastos destinados a la publicidad tanto online como offline de la empresa, incluyendo campañas en redes sociales, pueden ser deducibles como parte de la estrategia de marketing. Siendo deducibles tanto en el IRPF como el IVA.
- Servicios de gestoría y asesoría. Los honorarios pagados a profesionales de la gestoría y asesoría fiscal pueden ser deducibles como gastos necesarios para la correcta administración y cumplimiento de obligaciones fiscales. Pudiendo ser desgravable tanto de cara al IRPF como respecto a la cuota de IVA.
Las deducciones fiscales son una herramienta invaluable para reducir la carga tributaria de los autónomos y empresas. Es fundamental entender los requisitos y limitaciones de cada deducción para asegurar su correcta aplicación y evitar problemas con las autoridades fiscales Por ello, realiza una Asesoría para autónomos.
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